PEKÍN (Reuters) - El regulador del tipo de cambio de China dijo que
debe evaluar el impacto de las fricciones comerciales sobre los flujos
de capital y que utilizará medidas “anticíclicas” para responder a la
volatilidad de corto plazo, pero expresó confianza en que Pekín puede
lidiar con cualquier desafío dadas sus “abundantes” reservas.
Wang
Chunying, portavoz de la Administración Estatal de Divisas (SAFE, por
sus iniciales en inglés), dijo el jueves que el regulador “mejorará y
optimizará la gestión macroprudencial y la supervisión de mercado a
nivel micro sobre los flujos de capital transfronterizos”.
“Haremos
ajustes anticíclicos para lidiar con la volatilidad de corto plazo en
los mercados de tipo de cambio para mantener la estabilidad del sistema
financiero y el equilibrio en los pagos internacionales”, dijo la
portavoz en una reunión con medios de comunicación.
No hubo una
reacción inmediata a los comentarios de Wang en los mercados interno e
internacional del yuan, donde la moneda se ha debilitado cerca de un 7
por ciento contra el dólar desde el cierre del primer trimestre.
Debido
a que el yuan sufrió el peor mes del que se tenga registro en junio,
operadores y economistas han estado alertas a una intervención u otros
intentos por frenar su caída.
Wang dijo que la SAFE está
“prestando mucha atención a los flujos transfronterizos de capital” y
que el regulador “ha estado enriqueciendo y mejorando los planes de
contingencia y las política de reservas”.
En mayo de 2017,
después de un período de depreciación del yuan, el Banco Popular de
China agregó un “factor anticíclico” secreto a su fórmula para calcular
el punto medio de la tasa de referencia para la cotización de la moneda.
El banco central eliminó en la práctica dicho factor a comienzos de
año, debido a la remontada de la divisa.
Algunos analistas han
especulado que las autoridades podrían volver a aplicar el factor
anticíclico para atenuar las expectativas de depreciación y desacelerar
la tendencia bajista del yuan.
Wang dijo en la reunión que los
niveles de deuda externa de China estaban bajo control y que la SAFE
observaría con atención cualquier cambio y entregaría orientaciones
sobre su política si fuese necesario.